Cuando empece hace ya años a interesarme por el conocer el la realidad, que soy, que hago en esta existencia, que es la propia existencia, me lancé a devorar libros de las grandes creencias, de las conocidas como la Teosofia, el budismo, las religiones abrahámicas, las mitoligías griegas y egipcias, pero con el paso del tiempo, con el comienzo de mis experimentaciones empíricas con drogas, con meditaciones, con trances inducidos por música o ritmos repetitivos me he quedado maravillado por el conocimiento y la pureza que se encuentra en el chamanismo, en las primeras y arcaicas creencias de la humanidad.
Para mi, el chamanismo, por llamarle de alguna forma a las creencias ancestrales de tribus y pueblos ajenos a la institucionalización de las creencias o ideas en religiones, en sectas o en grupos de presión o poder, como digo, para mi, estos contienen el verdadero conocimiento de forma pura, tal cual como un ser humano comprende y experimenta su propia existencia en esta realidad. También contiene los trucos y métodos para interactuar con esa realidad para protegerse o conseguir algún beneficio, y todo esto de forma natural, de forma sencilla y humilde, cosas que falta de forma notoria en la mayoría de las religiones y creencias masificadas o llevadas a la "civilización". A veces, cuando pienso en la cantidad de asesinatos, tergiversaciones y persecuciones que se han hecho y se siguen haciendo a esas ideas, a gentes que profesas esas arcaicas ideas y creencias me entristezco o me cargo de ira. La mayoría de esas persecuciones llenas de ignorancia para borrar la sabiduría, llenas de odio fueron realizadas por grupos organizados, instituciones basadas en, a su vez, arcaicas ideas que fueron manipuladas y cambiadas por esos mismos grupos, por ejemplo el Cristianismo, el Islamismo...
Es apasionante cuando vas descubriendo las diferentes cosmogonías y creencias de los pueblos del mundo, como muchas cosas son comunes, como hay varios puntos que coinciden en la forma de comprender la realidad y la existencia. Incluso hay acciones de brujos y curanderos comunes entre chamanes de tribus alejadas por miles de kilómetros en el planeta. Uno de los puntos que mas me gustan es ver como en múltiples creencias se considera a todo, cada átomo del mundo como sagrado, como se considera sagrado al viento, a los arboles, a la arena..., y como en la mayoría de las creencias se les atribuye voluntad propia asignándoles nombres como espíritus o dioses. Es algo que esconde la gran verdad de que todo tiene una función propia, cada cosa tiene un simbolismo que influye en todo lo demás, pareciendo que u cambio en el viento por ejemplo puede afectar a que un niño nazca sano o enfermo. Así, un ser humano que experimenta y que observa estas realidades acaba confiriéndole al viento y a su símbolo una personalidad mas o menos antropomórfica con nombre de espíritu o dios, así es mas sencillo analizar ese símbolo con el fin de aprender como se comporta y que reacciones causa en el mundo y en sus vidas las modificaciones y "movimientos" de este símbolo, llámese le manifestación, cosa, objeto, o como se quiera, en el fondo, el que sabe comprende que solo es un símbolo. O quizás las ideas que llamaba Platón.
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